Do you know the oldest dog breeds in Spain? Have you ever listened about our perro de agua (water dog) famous for their curly hair and the elegant galgo (greyhound)? Listen to the origin and curiosities of the most typical dog breeds in Spain! 🐾🐕 (Advanced level)
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¡Hola! Bienvenidos a un nuevo episodio de Radio Muuaak. Yo soy Laura y hoy estoy con mi colaborador Gull. Vamos a hablar de razas de perros españolas, sobre todo su origen histórico. ¿Cómo es tu mejor amigo peludo? ¿Sabes cuáles son las razas de perro típicas de tu país? Parece una tontería, pero
La cultura incluye también el tipo de plantas y animales que puedes encontrar en un lugar
porque una parte importante del contexto es cómo se relacionan las personas con su medio y cómo este afecta a nuestro concepto de la realidad. Por eso, según el país en el que estés, encontrarás que ciertos perros son más frecuentes que otros. Al igual que nosotros los humanos, los perros se han adaptado a las circunstancias de su hábitat tanto en su aspecto físico como en su forma de actuar: por ejemplo, algunos tienen un pelo voluminoso para protegerse de temperaturas extremas mientras que otros, al estar en climas cálidos, han desarrollado un pelo fino para no sufrir un calor asfixiante.
— ¡Así es Laura! Encantados oyentes, bueno, bienvenidos a este nuevo podcast. En Inglaterra, es típico ver cómo pasean los perros Corgi que, de hecho, son los fieles compañeros de la mismísima reina, no sé si ustedes lo sabían. En Alemania, no es difícil darse cuenta de cuáles son las razas propias del país ya que incluso llevan nombres muy alemanes como Rottweiler, Schnauzer o Braco de Weimar. Cuando hablamos de España, no podemos olvidar que esta se divide en Comunidades Autónomas y bueno, cada una de ellas tiene sus propias razas típicas, por lo que podemos decir que cada Comunidad Autónoma es una especie de “micropaís” ¿no? Esto se debe, por supuesto, a que las condiciones climáticas y estilos de vida en las distintas regiones son muy distintas entre sí; no es lo mismo vivir en Castilla La Mancha que en Andalucía. España es tan diversa que incluso podemos observar distintos climas en un mismo territorio, ¿no es así, Laura?
— Pues sí, dentro de la clasificación reconocida de la FCI (Federation Cynologique Internationale), la organización internacional de pedigrí, podemos encontrar razas de perro agrupadas por características funcionales o físicas: perros pastores y boyeros, perros molosoides y de montaña, perros tipo Spitz y primitivo, perros de caza, sabuesos, de muestra o lebreles, entre otros. En el grupo de los pastores y boyeros destacan el perro pastor mallorquín o Ca de Bestiar y el perro pastor catalán o Gos d’Atura Català. El pastor mallorquín, originario de Mallorca como su nombre indica, se ha empleado tradicionalmente como perro guardián de rebaños y de casas. Su color característico es el negro y su aparición data aproximadamente del siglo 13. Por otra parte, el pastor catalán es una de las razas más antiguas de España, de hecho se estima que desciende de los perros de los conquistadores romanos a la Península Ibérica alrededor del año 150 a.C., aunque durante la Segunda Guerra Mundial estuvo al borde de la extinción. Como el pastor mallorquín, esta raza destaca como guardián, aunque uno bastante más lleno de pelo. A veces es difícil ver sus ojos tras todo ese pelo, pero tienen una mirada muy expresiva e inteligente. En cuanto a su color, se trata de una combinación de distintos tonos que da lugar a un pelaje gris o color arena.
— Sí, de hecho entre el grupo de los molosoides y perros de montaña yo destacaría los robustos dogo mallorquín o Ca de Bou y el perro de presa canario, que están emparentados y así mismo no hay que olvidar razas tan emblemáticas y gigantes como el mastín español o el mastín del Pirineo. En primer lugar, el dogo mallorquín tiene su origen en el año 1229 con Jaime I de Aragón, aunque en sí no recibe su nombre catalán hasta siglos más tarde. Curiosamente, podemos encontrar ejemplares de esta raza en otros países ya que en 1990 se exportaron a Polonia, Japón, Rusia o Estados Unidos, entre otros. Es conocido, por desgracia, por haberse utilizado en peleas de perros en la isla de Mallorca. En lo que respecta al perro de presa canario, este tiene su origen en los siglos XVI-XVII, más o menos y tiene un tamaño considerable y un cuerpo resistente. De acuerdo con una ley del Gobierno de las Islas Canarias, dicha raza es uno de los símbolos de Gran Canaria (una de las islas que conforman la comunidad autónoma). Seguramente el mastín, sobre todo el español (también conocido como leonés por ser más particular de esta región), es una de las razas más famosas y de gran tamaño de España y se trata de una variedad creada en el siglo XX, que abunda en las zonas rurales y se desarrolló especialmente para el pastoreo nómada o seminómada. El mastín de los Pirineos se diferencia del leonés en su zona de origen (en este caso Aragón) y en su pelaje, que es más abundante. Ambos mastines sufrieron un declive durante el mismo siglo XX, especialmente tras la Guerra Civil española, debido a las dificultades económicas que hacían complicado mantener no solo a un perro grande sino a la propia familia.
— En el siguiente grupo encontramos los podencos, que son frecuentes tanto en Andalucía como en Canarias, y de los cuales hay varios tipos: el canario, el ibicenco, el valenciano o el andaluz. Suelen tener poco pelaje, largas orejas y son excelentes cazadores, emitiendo un ladrido muy característico, corto y repetitivo. Por otro lado, el grupo de sabuesos españoles es relevante por su valor histórico, dado que su primera descripción, hecha por el rey de Castilla, data de la segunda mitad del siglo XIV. Es un perro de rastro originario del norte de España, usado durante siglos para la caza.
La siguiente raza es bastante peculiar: las raíces genéticas del perro de agua español nos llevan a emparentarlo con otras razas como el caniche y otros perros de agua de otros países. Aunque tiene un origen tan antiguo como incierto, las teorías apuntan a que podría haber sido introducida durante la invasión islámica del año 711. Actualmente, esta raza abunda en las Comunidades Autónomas de Extremadura y, sobre todo, de Andalucía.
— Otra raza representativa de todo el territorio español es el galgo, que pertenece al grupo de los lebreles. Posee una apariencia alta, delgada, con largo hocico y pelo corto. Destaca por su gran velocidad y por haberse empleado con frecuencia, como otras razas, con la finalidad de cazar. Aunque se piensa que proviene de los perros egipcios, las primeras referencias que tenemos del galgo español son de Roma. En el siglo XII, numerosos escritos describen las cualidades de los galgos. Resulta frustrante no obstante cómo, siendo una raza tan valorada en la Antigüedad, ha llegado hasta nuestros días siendo una de las razas más maltratadas y abandonadas.
— Pues sí, la verdad es que es una verdadera pena. Por último, hay que mencionar que hay muchas más razas españolas no incluidas en la FCI pero que son también bastante conocidas como es el caso del perro bodeguero o ratonero, del cual hay a su vez dos tipos: valenciano y andaluz. La principal diferencia entre ambos es física ya que el valenciano suele tener las orejas hacia arriba mientras que el andaluz se reconoce por sus orejas hacia abajo. El ratonero andaluz, procedente de la zona de Jerez de la Frontera (Cádiz), solía utilizarse para cazar ratones de las bodegas de vino, de ahí su denominación de bodeguero o ratonero. Esta raza aparece frecuentemente en series o películas españolas de recreación del mundo del vino andaluz. Su origen reside en otra raza, los Jack Russell terrier, puesto que los adinerados ingleses que compraban las bodegas de vino en Jerez traían a estos perros que, tras sucesivos cruces con otros perros cazadores, dieron lugar al bodeguero. Sin embargo, la raza como tal es más bien tardía, porque no se reconoce hasta principios del siglo XX.
Bueno, espero que te haya gustado este podcast sobre los amigos peludos españoles tanto como a nosotros, ¡nos vemos en el próximo episodio! ¡Hasta luego!
Podcast escrito y grabado por la profesora colaboradora 📚: Laura Fernández de Ginzo
